Como seguir una rutina de salud dental perfecta.

Sonreír forma parte del lenguaje universal, nos aporta seguridad, es agradable y refleja confianza. Actualmente el cuidado de la sonrisa forma parte de nuestra rutina diaria y lo realizamos de forma tan automática, que a veces no le damos mucha importancia.

Cepillarse los dientes y usar hilo dental es la base, pero el cuidado de la salud bucodental no se reduce solo a los dientes.

¿Qué es una rutina ideal de higiene bucal?

Todos somos diferentes. Y la rutina de cada persona también será un poco diferente, dependiendo de la edad, ocupación, dieta y otros factores. Ciertos aspectos de la higiene bucal, sin embargo, son universales: cuidado diario, revisiones y limpiezas profesionales con el dentista, una dieta saludable con pocas bebidas azucaradas o ácidas y beber agua con flúor.

A continuación te explicamos un programa básico que puedes hacer en casa que te ayudará a comenzar una rutina bucal perfecta.

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1. Cepillado

Cepillarse los dientes dos veces al día es fundamental, pero además debes tomarte tu tiempo.

Cepilla tus dientes durante al menos dos minutos, 30 segundos en cada cuadrante de tu boca. Si te resulta difícil de mantener, puedes usar un cepillo de dientes eléctrico. Hay varios modelos con temporizadores que funcionarán durante dos minutos y emiten un pitido cada 30 segundos para que sepas cuándo continuar.

Sostén tu cepillo en un ángulo de 45 grados con respecto a la superficie de los diente y apunta a tus encías. Para obtener los mejores resultados, cepilla hacia arriba y hacia abajo en las superficies frontal y posterior, luego hacia adelante y hacia atrás en las superficies planas.

CEPILLADO DENTAL

Si el cepillado dental no se realiza antes del desayuno, es recomendable esperar al menos una hora después de comer antes de cepillarse los dientes, especialmente si tomes algo ácido como zumo de naranja. El ácido debilita el esmalte de los dientes y la fuerza del cepillado puede dañar tus dientes.

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2. Usa hilo dental

Usa hilo dental en todos tus dientes al menos una vez al día, preferiblemente por la noche antes de irte a la cama. Usar hilo dental arrastra las partículas de comida que se esconden entre los dientes y ayudan a aflojar la placa para que el cepillado sea más efectivo.

Usa suficiente hilo dental para que puedas tener una sección limpia para cada diente. Enrolla el hilo dental alrededor de tus dedos índices y deslízalo, suavemente, hacia arriba y hacia abajo entre cada diente. Cuando el hilo se ensucie, retira una sección limpia para el próximo diente. ¡No olvides los molares!

Si usar un pedazo largo de hilo dental le resulta incómodo, un irrigador dental de agua es una gran opción. Se trata de un aparato de higiene bucal que impulsa un hilo de agua a presión. Es un gran sustituto del hilo dental.

HILO DENTAL

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Dra. Lourdes Verbo

3. Enjuague bucal

Lo último que debe hacer después de cepillarte los dientes y usar hilo dental a fondo es enjuagarte la boca con enjuague bucal. Cualquier marca servirá, así que elije una con un sabor que te guste y será más probable que lo hagas con regularidad. Vierta un tapón de enjuague bucal y colóquelo en tu boca durante 30 segundos, asegurándote de que tus labios estén cerrados y el enjuague bucal permanezca en tu boca para hacer su trabajo. Entonces escúpelo. Este simple acto ayuda a limpiar los pedacitos de alimentos que incluso el cepillado y el uso del hilo dental pueden pasar por alto. ¡Y deja tu boca totalmente renovada!

*Lleva tu salud bucal un paso más allá

Esos son los pasos 1-2-3 básicos de una buena higiene bucal. Pero si quieres dar un paso más, límpiate la lengua. Limpiarse la lengua es tan importante como cepillarse los dientes y usar hilo dental. Así como las bacterias pueden acumularse en los dientes y entre ellos, también pueden acumularse en la lengua y causar mal aliento. Rasparse la lengua con hilo dental o frotarla con un cepillo de dientes elimina las bacterias adheridas. Tarda menos de un minuto y, aunque no es necesario que lo haga cada vez que te cepillas los dientes, convertirlo en una parte regular de tu rutina marcará la diferencia en la salud general de la boca.

¿Cómo puedo saber si estoy haciendo un buen trabajo?

Aparte del hecho de que tu boca probablemente se sentirá fresca y saludable, hay algunas cosas específicas que notarás si tu rutina de higiene bucal está funcionando.

El aliento huele fresco y tus dientes se sienten limpios, nada borrosos, incluso a primera hora de la mañana.
Tus encías son de un saludable tono rosado, nunca rojo. Y no duelen ni sangran cuando te cepillas y usas hilo dental, cuando los tocas o cuando comes.

Por supuesto, existen algunos problemas que no podrás ver en un espejo. Por lo tanto, es importante visitar dos veces al año a tu dentista para una revisión rutinaria.

En las clínicas Lourdes Verbo, dentistas en Manzanares y Daimiel (Ciudad Real) te ofrecemos asesoramiento gratuito, grandes profesionales y los mejores resultados. Si quieres más información puedes visitar nuestra web o solicitar cita sin compromiso.

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